Natalia Mazzei Zubillaga: NMZ

NMZ es una de esas marcas que llevo siguiendo desde hace años y que, con cada colección, me hace creer más fuertemente en el increíble talento que tenemos en nuestra región. Sin ser exactamente minimalistas, sus diseños son atemporales y reflejan un lenguaje de marca cada vez más fuerte. En esta entrevista, Natalia Mazzei Zubillaga, la creadora detrás de la marca, nos cuenta su historia. Nos habla de la fuerte influencia de su madre, los viajes y el arte en sus procesos de creación y nos da su opinión sobre el estado de la moda venezolana y latinoamericana en la actualidad.

Fotografía de Natalia Mazzei Zubillaga, cortesía de la diseñadora

¿Cómo empezó tu camino en la moda? ¿Cómo nació tu marca?

Desde muy pequeña desarrollé un interés por la pintura y la costura. Tuve la gran oportunidad de estar muy conectada al mundo artístico gracias a mi madre museóloga, quien me vinculó a artistas plásticos y me enseñó a valorar y a disfrutar el mundo del arte en general. Considero que estas experiencias alimentaron mi lado creativo y fueron las que me llevaron a dedicarme al diseño de moda. Mi madre también solía llevarme a desfiles de moda. Este primer acercamiento a la industria también despertó en mi un interés en conocer este fascinante mundo.

Luego de graduarme en el 2011 en mi ciudad natal, Caracas, estuve realizando vestidos a la medida. Paralelamente, lancé una colección cápsula de camisas. El éxito con estas primeras piezas me llevó a concretar mi proyecto a finales del 2014 y formalmente presentar NMZ con el lanzamiento de nuestra primera colección, NATURA, para la temporada de primavera/verano de 2015.

¿Cuáles han sido tus mayores influencias? ¿Has tenido algún mentor?

Sin duda alguna, mi mayor influencia siempre ha sido mi madre. Una mujer moderna, llena de glamour, muy femenina y siempre elegante. Una mujer muy coqueta que me enseñó a lucir siempre bien sin importar la ocasión. Mi madre y mi hermana Martha son las dos personas que me impulsaron a lanzar mi marca. Siempre han creído plenamente en mí y en mi talento y junto a ellas fue que tomé la decisión de emprender.

No diría que he tenido un solo mentor. Pienso que en el camino he conocido a personas clave que me han brindado apoyo en el desarrollo de mi proyecto; personas que me han asesorado y me han guiado en el camino. Durante mi experiencia en Nueva York, estudiando mi carrera en el Fashion Institute of Technology (FIT, el Instituto Tecnológico de la Moda), tuve varios profesores que influyeron enormemente en mí. Ellos ayudaron a perfeccionar mis técnicas y muchas veces a cuestionar mis trabajos, a pensar más allá, a salir de mi zona de confort a la hora de diseñar.

¿Cuándo diseñaste tu primera colección? ¿Cuáles fueron los mayores retos y lo más gratificante?

La primera colección la diseñé en Venezuela en el 2014 y tuvo como inspiración la naturaleza. Pienso que, por un lado, fue una experiencia magnifica en donde dejé que mi creatividad fluyera: tenía poca experiencia y no conocía muy bien los procesos, así que decidí hacer lo que quería, lo que pensaba que estaba bien. Me lancé con una propuesta muy personal sin tomar mucho en cuenta las tendencias del momento. Hoy en día esto no es así; no es tan fácil ni tan libre. He aprendido todo lo que implica hacer una colección, respeto y cumplo con los distintos procesos necesarios para crear una colección.

En cuanto a los retos, muchos se relacionaban con mi poca experiencia. Contábamos con un equipo muy pequeño y me tocó hacer todo prácticamente sola. Quería hacer mucho, tenía muchas ideas, fue difícil concretar y escoger los primeros looks.

Lo más gratificante fue ver mi primera propuesta hecha realidad; ver cómo una simple idea en papel se transformó en una pieza real. El día del photoshoot me sentía sumamente emocionada al ver lo bellas que se veían las prendas. Ese día supe que esto era a lo que quería dedicarme el resto de mi vida.

¿En qué te inspiras para tus colecciones? ¿Cuál fue la última?

En NMZ, el arte y los viajes han sido una constante a la hora de crear. Sin embargo, realmente cualquier cosa me puede inspirar. Soy muy observadora, detallista, siempre estoy en búsqueda de inspiración. Me encanta caminar, sentarme en la calle y ver a la gente pasar, ver cómo se visten, cómo se comportan…

Nuestra última entrega es «Sueño Mediterráneo». Esta colección de Primavera-Verano nació a raíz de la colección anterior, inspirada en un viaje que hice a Marruecos. Es una colección llena de color, texturas y nuevas propuestas, en la cual las mangas juegan un papel muy importante. El «Sueño Mediterráneo» nace con la necesidad de utilizar textiles que teníamos almacenados: decidimos darles una nueva vida a estos materiales a través de bordados con motivos florales y geométricos que hacen referencia al Mediterráneo.

¿Qué piensas sobre la apropiación cultural? ¿Cómo podemos diferenciar entre la inspiración y la apropiación?

Es muy importante que como diseñadores entendamos la diferencia entre la inspiración y la apropiación cultural. Hoy en día, tener acceso a tanta información y el hecho de poder viajar nos permite inspirarnos en otras culturas. No debemos olvidar que esto sólo debe ser una inspiración, un punto de partida, no una copia o una apropiación de algo ya existente. Podemos tomar referencias y adaptarlas a nuestra visión, pero es esencial que la propuesta sea única, nueva, diferente y que realmente sea tu propuesta, tu voz y no la de otro.

¿Cómo ves la moda de Venezuela y Latinoamérica en el escenario internacional?

En Venezuela hay un movimiento muy interesante en cuanto a moda se refiere. Mi país está lleno de talento, de gente emprendedora y trabajadora. Creo que a raíz de la crisis, mucha gente se ha visto en la necesidad de reinventarse y de aprovechar la oportunidad para destacar. Sin duda alguna, la moda venezolana en el mundo está dando que hablar. Todavía hay mucho que trabajar, pero vamos por muy buen camino. En cuanto a la moda Latinoamericana, siento que cada día estamos avanzando. Hemos llegado a muchos rincones del mundo a llenar otras culturas con nuestros colores y sabor latino. Estamos brindado a otros países propuestas totalmente innovadoras y muy interesantes.

¿Cuál es la lección más importante que has aprendido en tu trayectoria?

He aprendido tanto… ¡podría hacer una lista muy larga! Te diría que he aprendido la importancia de la perseverancia; he aprendido a que no debemos tomarnos las cosas personales. Pienso que, al ser la cabeza de una marca que lleva tu nombre, muchas veces podemos estar tentados a tomarnos todo muy personal.

En el camino recorrido dentro de la industria, también me he dado cuenta de que hay que tener mucho cuidado al compartir tus ideas creativas, aprender a quién decirle qué.

Estos años me han permitido darme cuenta de que ir en búsqueda de un sueño y emprender no es nada fácil. Sin embargo, todo depende de la actitud y la pasión con la que hagas tu trabajo. Con pasión, perseverancia, metas claras y buena actitud, se puede lograr. No importan las dificultades que uno se encuentre en el camino, siempre debes levantarte y seguir.

¿Qué consejo le darías a alguien que está empezando en el mundo de la moda?

Particularmente, soy de las que piensa que la formación académica es muy importante para dedicarte a trabajar en el mundo de la moda. Mucha gente tiende a pensar que porque son creativas ya están listos para entrar en la industria. Personalmente considero que esto es una equivocación. Sin duda alguna, el talento es el secreto, pero debes pulirlo a través de una buena formación académica. Debes aprender a conocer cada uno de los procesos para poder dedicarte a crear y quizás a dirigir una empresa de moda. Adicionalmente, la experiencia profesional juega un papel sumamente importante. Pienso que es necesario para todos, especialmente para aquellos que decidan emprender con su propio proyecto. Esta experiencia te permitirá aprender de otros que tienen más experiencia que tú, entender los procesos y estar en contacto con la realidad de la industria de la moda. Estas dos herramientas las considero fundamentales hoy en día si deseas entrar en esta competida industria.

¿De qué sirve la historia para diseñar hoy en día? ¿Cómo se puede transformar el conocimiento de historia en inspiración creativa para la moda?

Sirve de mucho. Debemos conocer la historia para poder brindar propuestas innovadoras. La historia además nos permite aprender de los grandes: qué hacían y cómo lo hacían. La moda es cíclica, las tendencias van y vienen y por eso es tan importante estar empapado de ellas. Finalmente, la historia sirve de inspiración para crear en el presente: te permite tomarlas como punto de partida para brindar tu propia visión actual de algo que se hizo en el pasado.

¿Cómo podemos usar la moda para avanzar hacia la igualdad y la diversidad en Latinoamérica y el mundo?

Como creativos tenemos una gran responsabilidad en el mundo: podemos utilizar nuestras plataformas para crear o dar voz a movimientos sociales y culturales.  Este tema genera mucha polémica y no es fácil de manejar; es algo muy personal de cada marca. Pero ciertamente es necesario en la actualidad no sólo tomar o divulgar estas posiciones sino también creer y trabajar por esos cambios. Dejar ciertos estereotipos a un lado y avanzar hacia una imagen e industria más real y completa. Es un gran reto para mí y sin duda alguna para muchas marcas.

¿Qué piensas de la coyuntura del Covid-19? ¿Cómo ha afectado a tu marca y tu proceso creativo?

Estos meses han sido duros para todos. No sólo en el ámbito profesional, sino también en lo personal. Este tiempo me ha permitido hacer una pausa, la cual era muy necesaria para pensar bien las cosas y dedicarme más a mí. La industria de la moda es muy acelerada y exigente; a veces no nos permite parar para pensar, parar para diseñar con más libertad, sin tanta presión. Espero que todo esto lo tomemos como un aprendizaje y podamos valorar todo lo que tenemos. Que esta situación nos permita ser mejores seres humanos, más responsables con nosotros, con quienes nos rodean y con el medio ambiente.

** Todas las fotografías en este artículo son de la colección «Sueño Mediterráneo» de NMZ, cortesía de Natalia Mazzei Zubillaga.

Laura Beltrán-Rubio es investigadora, escritora, educadora y curadora del arte y de la moda, con énfasis en el mundo hispánico. Recibió su Maestría en Estudios de Moda de Parsons School of Design (Nueva York) y se está doctorando en la Universidad de William & Mary (Virginia). Su trabajo explora las construcciones de identidad a través de la moda y el arte en Europa y Latinoamérica.

En 2019, diseñó y dictó el primer curso introductorio a los Estudios de Moda en Colombia, ofrecido a través de la Maestría en Diseño de la Universidad de Los Andes en Bogotá. Su trabajo ha sido publicado en “Cuaderno”, el “Journal of Dress History” y ”Fashion Theory”.

1 Comment

  1. Super interesante el aporte!!!

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